Sexo seguro: Recomendaciones para practicar sexo seguro

Para mantener relaciones sexuales seguras hay que seguir una serie de ideas muy básicas, consiguiendo de este modo que no corramos el riesgo de contraer una enfermedad, una infección o de que tengamos una lesión. Una recopilación de las premisas esenciales para tener relaciones sexuales seguras son:

    • Realiza un examen médico: Es recomendable realizar un examen médico frecuentemente para conocer el estado de tu salud sexual. En muchas ocasiones, las personas que padecen una enfermedad de transmisión sexual no presentan síntomas, por lo que si no acuden a un doctor no son conocedores de este problema. Asimismo, si hemos practicado relaciones sexuales sin preservativo, debemos realizar unos análisis lo antes posible.
    • No tomes alcohol, drogas u otra sustancia que alteren tu comportamiento antes del sexo: No es recomendable tomar sustancias que puedan alterar el comportamiento antes o durante el sexo, tales como el alcohol, la marihuana u otros tipos de drogas. Estas sustancias modifican la percepción de la situación, por lo que se vuelve tremendamente complicado discernir entre fantasía y realidad.
    • Usa siempre preservativo: El uso de preservativo, como veremos más adelante, es vital para las relaciones sexuales seguras. El condón es una herramienta que sirve para evitar el contagio de enfermedades de transmisión sexual, enfermedades que se contagian mediante el contacto de los órganos sexuales de las personas. Además, el uso del condón disminuye las posibilidades de embarazo.
    • Utiliza lubricante sexual: El lubricante es un complemento sexual que facilita la penetración, así como el uso de juguetes sexuales y/o la masturbación. En determinadas ocasiones, pasamos por alto el uso del lubricante, pensando que con la lubricación natural de la vagina y la que viene incorpora en el preservativo es suficiente. No obstante, esto no siempre es correcto, ya que una mala lubricación puede producir desgarros musculares, dolor, heridas y rozaduras en zonas íntimas del cuerpo. Además, en relaciones sexuales anales es OBLIGATORIO el uso del lubricante, preferiblemente lubricante anal, ya que, como hemos mencionado en otras páginas sobre sexo anal, ni el ano ni el recto producen lubricación propia.
    • Controlar y conocer las posturas y posiciones que realizamos: Muchas de las posturas sexuales que existen requieren de un buen estado de forma, y, del conocimiento necesario para su ejecución. Por tanto, si no has probado una posición o desconoces por completo su funcionamiento debes buscar información para que no sufras ningún tipo de lesión.
    • Mantener una higiene general óptima: Además de mantener una higiene sexual adecuada, es imprescindible tener una higiene general óptima para mantenerse bien. En este sentido, utilizar un buen gel y champú para ducharse una vez al día, hacer deporte de forma regular y comer bien son aspectos vitales.

Complementos sexuales para mantener sexo seguro

Uno de los complementos sexuales más importante para disfrutar del sexo seguro son los preservativos. Los preservativos, también llamado condones o profilácticos son fundas finas y elásticas, fabricadas con látex u otro material equivalente, que se colocan en el pene para practicar el acto sexual. Asimismo, los preservativos pueden utilizarse también con juguetes eróticos, como dildos o consoladores. Los preservativos tienen dos misiones fundamentales:


    • Por un lado, los preservativos se utilizan para evitar el riesgo de contagio de enfermedades de transmisión sexual. Las enfermedades de transmisión sexual, llamadas comúnmente ETS, son enfermedades infecciosas que se contagian durante las relaciones sexuales vaginales, orales o anales. Varias de las ETS más conocidas son el SIDA, la sífilis o la gonorrea.
    • Por otro lado, los preservativos se utilizan para evitar el embarazo, es decir, evitar la fecundación del espermatozoide y el óvulo. La eficacia de los preservativos es del 98%, siendo uno de los métodos anticonceptivos más populares y eficaces que existen hoy en día.
En esta página puedes visitar los diferentes tipos de preservativos que existen, desde los packs de preservativos más tradicionales, a los packs de preservativos de sabores, los preservativos texturados, los preservativos XL, los preservativos ultrafinos o los preservativos sin látex. Si quieres conocer más sobre estos productos, puedes entrar dentro de la página específica de cada uno de ellos.

Además, otra categoría muy importante dentro de la salud y la higiene íntima a la hora de practicar sexo seguro son los lubricantes de placer. Existen muchos tipos de lubricantes, como los lubricantes tradicionales a base de agua, los lubricantes de sabores, los lubricantes específicos para sexo anal, etc. Todos estos productos ayudan a que los encuentros sexuales sean más placenteros, cómodos y satisfactorios

Además de servir para generar mayor placer durante la penetración, los lubricantes se pueden usar para la masturbación, incentivando el clímax y la excitación. Del mismo modo, los lubricantes evitan que los preservativos, debido a la fricción constante que sufren, se rompan. Si quieres saber más sobre algún tipo de lubricante concreto puedes visitar su página específica.

Por último, existen numerosas categorías más de productos que sirven para practicar sexo seguro, mantener una buena higiene íntima y favorecer el placer, ya sea durante el acto sexual o durante la masturbación. Es importante conocer estos juguetes sexuales y utilizarlos correctamente para disfrutar más aún del sexo.

Sexo seguro: Comunicación con la pareja

La comunicación con la pareja es una de las claves más importantes para practicar sexo seguro. Lo primero que debes hacer es, previamente al encuentro sexual, comunicar tus apetencias sexuales, tus gustos, es decir, las cosas que más disfrutas más y escuchar del mismo modo los gustos de la otra persona. ¿Por qué realizar esto antes del sexo? Muy fácil, porque durante el sexo es más difícil comunicar las cosas con fluidez.

No obstante, que hables con tu pareja antes del sexo no implica que no tenga que haber comunicación durante el sexo. La comunicación durante el acto sexual es vital. Muchas personas solo hablan durante el sexo para cambiar de postura, y, para hacer la típica pregunta «¿Te gusta?». En realidad, está bien preguntar si gusta lo que estamos haciendo, igual que es importante comunicarse para cambiar de postura, pero, es mucho más importante preguntar, «¿Por qué te gusta?» o «¿Qué es exactamente lo que te está dando placer?» 

Los gustos de las personas son muy variados en el sexo, y, muchas veces por miedo o vergüenza somos incapaces de decir lo que realmente disfrutamos, no vaya a ser que seamos «raros». Esto es un gran error, ya que si no estamos cómodos, no vamos a ser capaces de disfrutar al 100% y por consiguiente, no vamos a ser capaz de hacer disfrutar a la otra persona al mismo nivel.

A continuación, la cosa no acaba cuando termina el encuentro sexual, sino que solo vuelve a comenzar, ya que es el mejor momento para hablar y compartir las sensaciones de la experiencia.«¿Te acuerdas de aquello que hiciste? Me gustó mucho», «Quizás, si pruebas a hacer eso otro más despacio sea más placentero para mi», etc. Al final, como todo en esta vida, se trata de mejorar poco a poco, y, una buena comunicación sin tabúes, sin vergüenza, sin miedo, sin prejuicios y transparente ayuda a mejorar el sexo en pareja.

Para terminar, es muy importante reseñar que toda práctica que se realiza en pareja debe seguir la regla «SSC», debe ser segura, debe ser sensata, y, debe ser consensuada/consentida por ambas partes. La comunicación se basa en dialogar, en transmitir lo que nos gusta y en enterarse de lo que le gusta al otro.

Prácticas sexuales y su riesgo: Clasificación

Se consideran prácticas sexuales seguras y sin riesgo:

    • Magreo o petting, es decir, los besos, caricias, masajes, roces y tocamientos con ropa.
    • Masturbación, es decir, tocamientos propios sin contacto con los fluidos de otra persona.
    • Sexting o sexteo, es decir, el chat y envío de mensajes sexuales con una o varias personas. Dentro de esta categoría entraría el denominado sexo telefónico.
    • Utilización de juguetes sexuales de forma individualizada.
    • Utilización de juguetes sexuales con preservativo, intercambiando el preservativo para cada persona.
    • La felación o sexo oral con preservativo.
    • Sexo vaginal con preservativo.
    • Sexo anal con preservativo y lubricación externa.
    • Cunnilingus y anilingus con barrera bucal de protección de látex.

En definitiva, todas las prácticas sexuales en las que no hay un contacto directo de transmisión de fluidos entre el pene, la vagina, el ano y/o la boca.

Por otro lado, se consideran prácticas sexuales con cierto riesgo:

    • La felación o sexo oral sin preservativo, siempre que no haya eyaculación.
    • Cunnilingus y anilingus sin barrera bucal de protección de látex.

Estas prácticas se pueden realizar, siempre con personas de confianza, y, teniendo muy presente que ciertas enfermedades pueden transmitirse con el contacto boca a vagina/pene/ano.

Por último, se consideran prácticas sexuales de riesgo:

    • La felación o sexo oral sin preservativo con eyaculación en la boca.
    • Sexo vaginal sin preservativo
    • Sexo anal sin preservativo y/o lubricación

Las prácticas que se muestran a continuación poseen un gran riesgo de contagio de enfermedades de transmisión sexual, así como otras enfermedades derivadas de una mala higiene o de una incorrecta realización.